El mes de Julio, nos trae recuerdos que aún que pasen los años, en nuestra memoria seguirán con nosotros.
Son fechas que forman parte de nuestras vidas.
- Días que parecen iguales pero no lo son. Tenemos que seguir...
Hemos ido ha a comer a un pueblo cercano, hemos paseado, hemos comido en un restaurante muy bonito parece un castillo, o una casita encantada, como los recortables que hacía yo de pequeña, siempre soñaba con una casa así, casas y castillos donde dejaba volar mi imaginación.
Hemos disfrutado de la compañía de mis nietas que pasan las vacaciones en un campamento.
- Las hemos abrazado, mimado. ¡ Que bien me he sentido rodeada de los que quiero!
Como el día es tan largo, mi hija me ha animado, siempre decía yo que me gustaría visitar Panillo, hay allí un templo budista.
Nos hemos dedicido y a Panillo que hemos ido.
El paisaje es bonito, silencioso, es lo que mejor lo define, " el silencio"-.
Solo se oye el murmullo del viento agitando los "pañuelos" son oraciones escritas que el viento las lleva a todos los rincones del mundo.
El templo colorista, un espacio distinto, con la imaginación nos hemos trasladado al Tibet, (el Tibet visto en miles de reportajes) ¡ Es así!.
Encendimos dos velas, no importa que sea Buda o Dios, siempre las oraciones llegan y más si se dicen con amor, con fe.
"No quiero que te vayas dolor.
Porque se me vendrá todo el amor de golpe.
Cuando me siento triste y os siento lejanos". (Neruda)
María Luisa
martes, 8 de julio de 2008
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